El concierto en la azotea del edificio Apple

30 de enero de 1969, 12 pm – En la azotea del edificio Apple, en Londres, los Beatles ofrecen su última actuación en directo el cual formó parte del final de la película Let It Be.

Esa mañana Mal Evans y Neil Aspinall montaron los instrumentos como antaño y los Beatles, con Billy Preston, se instalaron en la azotea del edificio Apple en Saville Row, Londres. El tráfico se embotelló ya que una multitud de gente aprovechó la hora del almuerzo para reunirse en la acera frente al edificio, y todas las ventanas y azoteas cercanas se llenaron rápidamente con oficinistas del West End, que tuvieron una vista privilegiada del ultimísimo concierto de los Beatles.

La policía trató de pararlo pero los guardias de seguridad de la puerta de Apple, de un lado, y del otro la resistencia de la policía a tirar del enchufe en un acontecimiento tan extraordinario, hicieron que el grupo tocara durante cuarenta y dos minutos.

30 de enero de 1969,

Los Beatles comenzaron con un ensayo de Get Back mientras las cámaras se instalaban correctamente. Luego siguieron con otra versión de Get Back. Una edición de estas dos versiones se incluyó en la película Let It Be. Después John Lennon dijo: We’ve had a request for Daisy, Morris and Tommy.

La tercera canción fue Don’t Let Me Down, como aparece en la película Let It Be. Luego siguieron con I’ve Got A Feeling, que fue utilizado en la película y en el álbum. Al final de la canción se le oye a Lennon diciendo:  Oh my soul, so hard.

Tras una breve pausa continuaron con One After 909, versión que también fue utilizado en la película y en el álbum.

Luego siguieron con Dig A Pony. Pero primero hicieron una versión de ensayo y Lennon avisa que no recuerda la letra, así que un asistente se colocó de rodillas ante él sosteniendo el texto de la canción. Ringo Starr interrumpió el One, two, three de la entrada con un ¡Para!, porque se encontraba distraído tirando un cigarrillo. Cuando está listo comienza la canción que concluye con John diciendo entre aplausos Thank You brothers… hands too cold to play the chords. Al final de Dig A Pony se acabó la cinta y Alan Parsons colocó un nuevo carrete. Para darle tiempo a Alan, los Beatles y Billy Preston interpretaron una versión de God Save the Queen.

El show continuó con otra versión de I’ve Got A Feeling y Don’t Let Me Down.

Las imágenes de I’ve Got A Feeling están también intercaladas con opiniones de los transeúntes abajo en la calle. Así podemos ver a un hombre de mediana edad, vestido con abrigo y sombrero que aclara: Cantan bien, ¿qué más puedo decir?. A continuación aparece una enojada anciana con gafas que exclama: ¡No tiene ningún sentido!. Una chica con abrigo rojo opina que el concierto Nos alegra las horas de oficina. Un peatón con abrigo gris y aspecto de hombre de negocios afirma: Este tipo de música está bien en el lugar apropiado, pero no me parece bien interrumpir los negocios de esta manera. Dos chicas con abrigos azules declaran: Fabuloso, es fantástico. Un sacerdote asegura que: No está mal tener algo gratis en este país y finalmente, un hombre de negocios desde el interior de un taxi pregunta: ¿Es su nuevo disco? Lo compraré.

Los agentes de policía Ray Dagg y Ray Shayler entraron al edificio de Apple cuando sonaba ‘I’ve Got A Feeling‘. Inicialmente creyeron que la música provenía del estudio del sótano y se dieron cuenta tardíamente de que provenía del techo.

Los oficiales de policía fueron demorados por el portero de Apple, Jimmy Clark, quien los mantuvo hablando a propósito para permitir que los Beatles siguieran tocando. “Solo están haciendo un par de canciones, eso es todo”, les dijo Clark, y también les informó que era para un álbum y una película. “Bajen ahora, o voy a empezar a arrestar gente”, le dijo PC Dagg, de 19 años.

Mal Evans había estado entreteniendo a los policías, diciéndoles que habían apagado el sistema PA y que necesitaban hacer cambios en el estudio del sótano. Sin embargo, durante la interpretación de I’ve Got A Feeling, los policías exigieron que Evans los llevara a la azotea.

La última canción fue Get Back, aunque en ese momento los Beatles casi dejaron de tocar porque llegó la policía en la azotea. Los oficiales exigieron a Mal Evans que apague los amplificadores Fender. Él obedeció pero George Harrison de inmediato exigió que volviera a prender.

Paul McCartney improvisó lo siguiente: «Has estado tocando por las azoteas otra vez y ya sabes que a tu madre no le gusta. ¡Ella te hará arrestar!«.

Al final de la canción, Maureen Starkey, (esposa de Ringo) estalló en grandes aplausos y gritos haciendo que Paul volviera al micrófono y se lo agradeciera: «¡Gracias, Mo!». Luego John agregó su famosa frase: «Quiero dar las gracias en nombre propio y del grupo, y espero que hayamos pasado la prueba».

Después de bajar de la azotea, los Beatles se reunieron en la sala de control del estudio del sótano para escuchar las grabaciones. Inicialmente querían grabar las canciones restantes esa tarde, pero debido a que iba tomar mucho tiempo en desarmar y volver a armar el equipo, se tomó la decisión de continuar grabando al día siguiente.

30 de enero de 1969, los Beatles tocando en la azotea del edificio Apple

Se utilizaron un total de 10 cámaras para filmar el show. Cinco estaban en la azotea de Apple; uno estaba colocado en un techo al otro lado de la calle; tres estaban en la planta baja fuera del edificio para captar la reacción del público; y uno estaba escondido en el vestíbulo de recepción en 3 Savile Row.

George Harrison: Instalamos una cámara en el área de recepción de Apple, detrás de una ventana para que nadie pudiera verla, y filmamos a la gente que entraba. La policía y todos entraron diciendo: ‘¡No pueden hacer eso! Tienen que parar.

Se estudió la posibilidad de colocar una en un helicóptero para obtener planos aéreos, pero estaba prohibido que ese tipo de aparatos sobrevolase Londres. Tampoco hubo tiempo para obtener los permisos necesarios y alquilar un globo.

El concierto comenzó alrededor de las 12:00 del mediodía, recordando los horarios matinales en que solían actuar en el Cavern de Liverpool, pero esta vez la actuación era en medio del frío invierno londinense, acentuado por un persistente viento que se volvía aún más gélido en lo alto de un edificio de oficinas.

Para hacer frente a esta situación John Lennon tomó prestado el abrigo de piel de Yoko Ono y Ringo Starr se llevó el impermeable rojo de su esposa Maureen Starkey.

El tráfico en Savile Row y las calles vecinas quedaron bloqueadas hasta que la policía entró al edificio y ordenó al grupo que dejara de tocar.

El show de 42 minutos fue grabado en dos máquinas de ocho pistas con la producción de George Martin, Glyn Johns como ingeniero de sonido y Alan Parsons como operador de cintas.

Los Beatles aún no estaban seguros de la actuación y se reunieron para discutir la idea mientras se hacían los preparativos de última hora. George Harrison fue el más reacio, pero finalmente accedió después de que todos los demás miembros expresaran su entusiasmo.

Alan Parsons recuerda: Ese fue uno de los días más grandes y más emocionantes de mi vida. Ver a los Beatles tocando juntos y conseguir una respuesta inmediata de la gente alrededor de ellos, cinco cámaras en el techo, cámaras en las calles, en el camino, era simplemente increíble.

George Harrison: Fuimos a la azotea con el fin de resolver la idea de un concierto en vivo porque era mucho más sencillo que ir a otro lugar. También nadie había hecho eso, y era interesante ver lo que pasaría  cuando empecemos a tocar allí.  

FUENTE: Los Beatles Día A Día de Barry Miles.